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Este bote, metálico, ya hace años que está en mi cuarto de baño cumpliendo su función fielmente una vez al mes. Asi que ya le tocaba una renovación, una "lavada de cara".
Despues de unas capas de pintura y un poquito de decoupage, ha quedado asi de bonito, me encanta el resultado. El contraste del rojo de las amapolas, con los tonos beige del fondo.

Además, en esta ocasión, el craquelado quedó genial.

Esta otra caja ya hace días que la terminé, no me gusta tanto como la anterior. Pero teniendo en cuenta que era una caja de madera muy basta,que contenía un queso, con olor y logotipos incluidos, el resultado ha sido aceptable. En este caso tambien le di unas capitas de pintura, pero la mayor parte de lo que la forra es tela.

1 comentario:

Anónimo dijo...

wauuu te han quedao lindas¡¡¡ y el craquelador te ha quedado muy bien¡¡ ahora...donde las vas a lucir???